Programas de capacitación en aparado y otros procesos, diversificación en la oferta de productos, la recuperación del mercado nacional y una mayor internacionalización de las empresas del sector, son algunas de las recomendaciones emanadas del estudio “Diagnóstico y Recomendaciones para la Industria Chilena del Calzado”, dado a conocer hoy en un seminario organizado por ProChile, junto a la Cámara de Industriales del Cuero, Calzado (Fedeccal) y el Centro de Desarrollo Tecnológico (CIATEC) de México, en dependencias del hotel NH, en Santiago.

La producción de calzado en Chile ha disminuido drásticamente en los últimos años, poniendo en riesgo el desarrollo del sector, por lo cual, según indica el estudio, es necesario desarrollar un plan estratégico para el fortalecimiento de la industria. En su cadena productiva el sector cuero y calzado en Chile ocupa en forma directa e indirecta aproximadamente 8 mil trabajadores, que laboran en 350 talleres y fábricas.

A mediados de 2012, la Agencia de Cooperación Internacional de Chile (AGCI); ProChile, junto a la Federación del Cuero y Calzado de Chile (Fedeccal), dieron inicio a un plan de capacitación en el marco del proyecto, “Fortalecimiento de los vínculos de cooperación e intercambio entre la industria del calzado de Chile y México, para mejorar la competitividad y facilitar su inserción en los mercados de exportación”.

El objetivo de esta iniciativa es reforzar los vínculos de cooperación técnica y comercial entre las industrias del cuero y calzado de Chile y México. La idea es aplicar en Chile las innovaciones y experiencia mexicana, para superar sus brechas competitivas en las áreas de producción y gestión de Pymes proveedoras de servicios de costura.

Actualmente más del 85% de la producción de Chile del cuero y calzado va para el consumo interno y en los últimos años las exportaciones del sector se han mantenido estables. No obstante, el sector del cuero y calzado espera que este proyecto pueda también incentivar los envíos al exterior. De hecho, el fortalecimiento que se logre en una alianza estratégica de ambas industrias, podría concretarse en la apertura de nuevos mercados compartidos que individualmente como país no podrían lograr, aprovechando que Chile tiene 22 acuerdos comerciales con alrededor de 60 países.

El proyecto cuenta con recursos del Fondo de Cooperación Chile-México, por un monto de US$ 140 mil, más un aporte de la empresa privada cercano a los US$ 154 mil. Una de sus primeras actividades fue la capacitación que desarrolló el grupo empresarial con sus similares de la industria en el Estado de León, en México. Posteriormente, el grupo ha transferido este conocimiento a los talleres externos con los cuales las empresas del sector están asociadas.