La pandemia ha sido un gran catalizador de nuevas tendencias, impactando en las prioridades estratégicas de lasempresas que avanzan hacia modelos de negocios conducidos por un propósito. Se observa que, a pesar del escenario económico adverso, las empresas están invirtiendo en mejorar las condiciones laborales y sociales, y manteniendo sus compromisos ambientales pre- covid.

En este contexto, también se han acelerado tendencias de consumo y mercado, las que han sido alertadas por las Oficinas Comerciales de ProChile en el mundo. Se observa una fuerte preferencia por lo local, como medida de reactivación económica y por su bajo impacto ambiental. Asimismo, el packaging se está convirtiendo en un factor decisivo en la compra, no solo por el material utilizado, sino por lo que comunica. En este sentido, los productos que cuentan con certificaciones en sostenibilidad, como carbono neutral y/o promueven la economía circular y lo comunican asertivamente, tienen más prevalencia que otros. También se observa que, en mercados con sólidas estrategias de sostenibilidad, como Australia y en países de Europa, indican a través de sellos o espacios preferentes en góndolas, los productos locales y justos.

Existe un aspecto positivo de esta pandemia, y es que ha hecho que tanto empresas como consumidores estén siendo movidos por un propósito común, lo que en lenguaje sostenible se llama: reconstruir mejor (Build Back Better).